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Disfrutar de la tranquilidad de Hoi An

Hola a todos, 

En enero de 2018 nos fuimos a visitar Camboya y Vietnam. Nos organizamos para ver la mayor cantidad de sitios posibles en casi 20 días. 

El viaje en general trascurrió bien, aunque hay bastante contaminación, bastante suciedad y los hoteles también están muy sucios. A pesar de que buscábamos en booking.com los hoteles con 5 estrellas en limpieza, cuando llegábamos estaban siempre sucios y había cantidades increíbles de polvo por todos lados. 

Empezamos por Camboya, estuvimos en Koh Rong Samloem y en Siem Reap para ver Angkor Wat. Luego ya empezó el recorrido por Vietnam. En Hanoi, tuvimos una experiencia malísima con una agencia de viajes donde contratamos la excursión de Sapa y de Halong Bay. Esto nos arruinó un poco esos días y nos bajó los ánimos.

Además, a estas alturas del viaje, ya estábamos bastante cansados del acoso de la gente para venderte cosas. Cada vez que salías de las ruinas o que ibas por la calle, estaban los vendedores gritándote: “shopping?”, “very cold drink” “something to drink?”, “something to buy?”. Agobiante.

Ya necesitábamos algo de tranquilidad. 

La última parada de este viaje fue Hoi An, un sitio del que todos los turistas que habíamos encontrado, nos habían hablado muy bien. Esta ciudad es considerada la más bonita de Vietnam.

Nos alojamos en una casa grande y nueva que estaba como a 15 min en bicicleta del centro. Era una casa con varias habitaciones que funcionaba como B&B. Lo primero que tengo que decir es que era la primera vez, en los 20 días de viaje, que veíamos una aspiradora. La habitación era grande, nueva y super limpia. O sea, que la cosa ya empezaba bien. 

Teníamos las bicicletas gratis en el hotel, lo que ya era otra cosa buenísima. Así que agarramos nuestras bicicletas y nos fuimos al centro. Por donde nos alojábamos nosotros, no se veía casi gente en general, pero cuando llegabas al centro, eso era un mar de gente por todos lados. 

Era todo lindo, colorido y no es tan ruidoso como Ho Chi Minh, por ejemplo. Por todos lados veías a la gente con sus bicis y nosotros, llegábamos a donde empezaba el centro, dejábamos las bicicletas y ya paseábamos tranquilamente a pie. Es todo super tranquilo, por lo que no hay que preocuparse de que te la vayan a robar.

Nos pasamos muy bien los días en Hoi An, nos hicimos buenos paseos en bicicleta por los campos de arroz, fuimos a la playa, comimos muy bien y visitamos las ruinas de My Son

Como pueden ver en las fotos, nos tocó bastante lluvia, pero igual disfrutamos de la estadía. Cuando estuvimos, comprabas un ticket a la ciudad antigua que incluía la entrada a cinco sitios y nosotros visitamos uno de cada categoría. Si quieren visitar los sitios tranquilos, vayan muy temprano porque a las 11 am ya empiezan a llegar los mega autobuses llenos de chinos y eso se vuelve una locura. 

Esta ciudad es famosa por sus sastres; en todos los sitios tienen catálogos con vestidos y trajes que te hacen de un día para el otro. Una cosa curiosa es que veías muchísima ropa con diseños de frutas; yo me compré un vestido de patillas, un mono de bananas y etc. Iba loca por toda la ciudad viendo los vestiditos y quería comprármelo todo. 

En Hanoi y en Ho Chi Minh, por ejemplo, la cantidad de motos y tráfico era una auténtica locura. Para cruzar las calles nos poníamos pegaditos a la gente local y así pasábamos. Además, imagínense el ruido. En Hoi An eso no existe, lo que considero importantísimo.

En definitiva, mi experiencia en esta ciudad fue lo mejor o entre las mejores del viaje. Si planean ir a Vietnam, anótense Hoi An como parada obligatoria. 

Aquí les dejo el link a mi video de YouTube por si quieren ver un poquito del paseo que hice por Hoi An.

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