Hola a todos,
Hoy les voy a resumir por puntos lo bueno y lo malo del país:
Lo bueno
- La gente
En general, me quedé enamorada de los peruanos por su educación desde el primer día. Son amables y siempre están dispuestos a ayudarte. Además, me dio la impresión de que hay un trabajo social y cultural para generar un cambio de mentalidad y que la gente deje de tirar basura y contaminar el ambiente.
- Alojamientos y hospitalidad
En Lima encontramos los alojamientos más baratos de nuestra historia como nómadas digitales. Además de que fueron los más económicos, en general, los anfitriones sabían de hospitalidad, lo que es raro encontrar en Airbnb.
Como somos nómadas digitales, necesitamos alojamientos con zona de trabajo para dos, buen equipamiento de cocina, buenas calidades de muebles, etc. Luego de haber investigado bastante, solo encontramos alojamientos que se adaptaran a nuestras necesidades en Lima.
Si comparo con lo que vimos en Colombia y en Playa del Carmen, las construcciones en Perú son de mejor calidad.
Para el resto del país y sobre todo sin son lugares en los que hace frío, les recomiendo que se queden únicamente en hoteles.
- Seguridad
Perú en general me pareció un país seguro. Puedes caminar por cualquier lugar a cualquier hora. Estuvimos también en zonas humildes y tampoco nos sentimos inseguros. Además, se ve siempre policía patrullando.
- Comida
La comida en Perú es exquisita y, de hecho, en Lima está el mejor restaurante de Sudamérica: Central Restaurante. Nosotros no fuimos porque no tenían opciones veganas. Además, tienen el mejor maíz del mundo. Creo que es lo que más extrañaré del país.
Hay muchísima variedad de verduras, frutas y legumbres, y de excelente calidad. Incluso encontramos una variedad de aguacates sin semilla.
Lo malo es que los alimentos preparados, al igual que en toda Latinoamérica, siguen teniendo ingredientes cancerígenos como el glutamato monosódico.
- Medidas covid
Desde el primer día me quedé maravillada de la perfección en el cumplimiento de las normas por Covid. Desde que comenzó la pandemia, no había estado en ningún país en el que fueran tan estrictos con las normas y mucho menos en el que no viera a nadie con la mascarilla mal puesta.
En Lima sobre todo hubo muchas muertes por covid y aprendieron a cuidarse.
Además, Perú es de los pocos países en los que vacunan gratis a los turistas. Simplemente hay que registrarse en una página y vas a cualquier punto de vacunación sin necesidad de hacer cita. De hecho, iban mucho más avanzados que España en el proceso de vacunación.
- Migración
Según me explicaron, el proceso para obtener la residencia en Perú es fácil, aunque caro.
Inicialmente te dan un permiso de residencia de un año y a partir de allí, puedes optar por la residencia permanente.
No hace falta tener trabajo para que te den un permiso de residencia. Esto es impensable en Europa ya que si no vas con trabajo (o tienes pasaporte de algún país de Europa) ni te dan permiso de residencia, ni te dejan abrir una cuenta en el banco, ni te dan ninguna identificación como extranjero.
- Economía y precios
Perú tiene una economía fuerte y más si comparamos con el resto de los países de Latinoamérica. Puedes sacar dólares del cajero y en ningún otro país he visto que puedas sacar otra moneda del cajero que no sea la nacional.
Hay cosas más baratas que en Europa y otras más caras. Por ejemplo, el skincare y la depilación láser, son mucho más caros que lo que estoy acostumbrada a pagar en Europa. El Botox, ácido hialurónico y prp, son más baratos que en Europa.
La diosmina para un mes cuesta casi $25, en España me costaba 13 euros la caja de dos meses. El magnesio más barato que encontré costaba $10 (60 pastillas), cuando en el Lidl cuesta menos de 5 euros el pote de 100 pastillas.
Los gimnasios en las zonas en las que nos alojábamos, eran bastante caros. Muchos costaban más de $100 al mes y y solo podías hacer 3 clases a la semana.
Los precios de las viviendas, autos, y cirugías plásticas, están dolarizados. De hecho, para comprar vivienda, el banco te da el préstamo en dólares, aunque la moneda oficial sea el sol.
Durante el tercer mes que estuvimos en Perú, hubo una huelga de transporte, varias manifestaciones contra el gobierno e incluso un día de toque de queda por los saqueos. Aun así, no vi ningún supermercado vacío. Por lo que me atrevo a decir que, en general, los peruanos son bastante civilizados.
Piensen que, en España, el primer día de huelga de transporte, ya la gente había dejado los supermercados vacíos.
Lo malo
Quiero resaltar que nosotros estábamos contentos en Perú y más si comparamos con las experiencias horribles que habíamos tenido desde noviembre de 2021, pero la gente con la que hablamos en Lima estaba muy descontenta con el gobierno y con la situación general que estaba viviendo el país. Mientras a nosotros nos parecía que Lima estaba cuidada y arreglada, los peruanos nos dijeron que la ciudad estaba cada vez peor.
Aquí denoto un aspecto muy positivo que es el “ser crítico”. El peruano se queja, critica y lucha porque el país mejore. En cambio, en Colombia, se llenaban la boca diciendo lo maravilloso que era el país y presumiendo que Medellín es la ciudad más bella del mundo cuando están hundidos en la delincuencia y la miseria.
Vamos con lo que no me gustó de Perú:
- Ruido y contaminación
Las ciudades son extremadamente ruidosas. Tienes las alarmas de los carros sonando todo el día, ruidos de las construcciones, los carros tocando corneta como locos, las puertas de los garajes pitan cuando abren, los autos también pitan cuando retroceden, etc.
Esto fue una pesadilla durante los tres meses que estuvimos en el país. Nosotros no nos podíamos creer que pudiera haber tal excesiva cantidad de ruido en las calles.
Aunque no ves demasiada basura por las calles, hay bastante contaminación de aire; aunque no es tan extremo como en Colombia.
- Circulación
La gente maneja mal y no hay respeto por los peatones, hasta el punto de que muchas veces no paran cuando tienen el semáforo en rojo. Las motos directamente se saltan todas las normas.
- Centralización
El país está completamente centralizado en Lima, a tal punto que el resto de los lugares se sienten un poco abandonados. Callao, por ejemplo, se encuentra a 30 minutos en auto de Lima y la diferencia es abismal ya que está descuidado y las construcciones cayéndose a pedazos.
De hecho, la zona alrededor del aeropuerto que también pertenece a Callao, todavía tiene calles de tierra.
Aguas Calientes, el pueblo que está al lado de Machupicchu, permanece igual que cuando yo visité en 2011. Hablando con los locales en Cusco respecto a que no se veía dónde se invertía el dinero del turismo ya que no había infraestructura, me dijeron que todo el dinero se iba a la capital.
Hace falta invertir en infraestructura en el resto del país.
- Trabajo
Yo sabía que, por ley, los peruanos tienen 30 días de vacaciones al año; incluso más que en España, donde son 22.
Pero no todo el mundo tiene derecho a disfrutar de esas vacaciones. En el primer alojamiento de Lima me encontré con un guardia de seguridad que era venezolano y me contó que se iba a Chile porque tenía mejores condiciones laborales. En Perú, sus contratos eran de 12 horas seguidas por guardia y terminaba trabajando 16; además, solo tenía un día libre a la semana que perdía completamente recuperándose de las 16 horas de trabajo. Además, no tenía vacaciones nunca.
Un primo que vivía en Lima también se quería ir a Chile porque “la vida en Perú era muy estresante”.
Por otra parte, un amigo vivió en Lima muchos años y me dijo que él sí tenía 30 día al año y buenas condiciones laborales (buen sueldo, beneficios y servicios). Pero me explicó que en Perú hay sectores informales conviviendo como formales y que hay abuso de poder y discriminación con los estratos más bajos, por eso no todo el mundo tiene los mismos derechos.
- Alquileres de carros
Los alquileres de autos son más caros que en Europa. En Portugal y en Turquía pagamos 25 euros por día con la cobertura total y sin tener que dejar ningún depósito de seguridad. Lo más caro que habíamos pagado hasta el momento era en Sardegna y nos salió en 65 euros por día aproximadamente.
En Hertz vimos precios de entre $60 y $70 por día y teniendo que dejar un depósito de seguridad de $800. Además, luego resultaba que solo tenían camionetas que costaban $90 al día.
En Alamo rent a car nos dieron un precio de $65 por día.
Más allá de los precios, el problema es que no había disponibilidad y la reserva que hacías por internet no servía para nada. La única forma era ir el mismo día a ver si quedaba algún auto. Lógicamente así no hay forma de organizarse ni de reservar hoteles porque te arriesgas a perder el dinero.
- Gestión del turismo
En Perú, como en muchos países de Latinoamérica, todo está ideado para que la gente pague tours. Es muy difícil hacer turismo de forma independiente y casi imposible alquilar un carro. Fuera de Lima, el transporte público es escaso.
Además, hay desorganización en la gestión de los sitios turísticos. Ya pudieron leer sobre el desastre en el que convirtieron Machupicchu. Además, hay muchos lugares que están gestionados por comunidades locales y si dichas comunidades empiezan a pelearse por el dinero, el sitio turístico se cierra indefinidamente.
Queríamos ir a Paracas y estuvimos 3 meses intentándolo. Primero teníamos la absurda situación con las empresas de alquileres de carros, por lo que era imposible reservar con antelación y luego, la huelga de transporte también afectó el servicio de autobuses, por lo que tampoco era posible reservar el bus con antelación.
Descarté ir a Iquitos porque a pesar de que recomiendan mucho conocer la selva, luego de investigar y ver fotos en redes sociales, me di cuenta de que está convertido en un “parque de atracciones” en el que los aborígenes están bailando para los turistas y hay mucha explotación de especies salvajes para el turismo. Por lo que estás lejos de tener una experiencia real en la selva.
- Aerolíneas
La aerolínea más barata es Sky Airlines y es un absoluto desastre. Luego está Latam que es más cara y funciona un poco mejor. Además, apenas hay un poco de neblina, cancelan los vuelos.
- No existe el Tax Free
Los primeros días preguntamos en unas cuantas tiendas y la gente no tenía ni idea de lo que estábamos hablando. Luego leímos que el gobierno en algún momento lo tuvo como proyecto, pero nunca se hizo.
- Pérdida de los idiomas autóctonos
Yo pensaba que en la escuela se enseñaban los idiomas autóctonos, pero nos explicaron que no. De hecho, todos los idiomas como el quechua se están perdiendo ya que en la actualidad solo lo hablan las personas mayores. Al parecer, el gobierno no hace nada al respecto.
En general, la estadía en Perú no estuvo mal, pero el país tiene mucho que mejorar en lo que se refiere a infraestructura ya que estás totalmente limitado a los tours. Es casi imposible alquilar un carro o ir a los sitios en transporte público. La única «ciudad» con todos los servicios y comodidades, es Lima. Además, está el ruido excesivo en todas las calles.
Aun así, quedé encantada con la educación de los peruanos y completamente enamorada de los paisajes maravillosos que tiene el país y de la infinidad de complejos arqueológicos.