España ni para vivir ni para turismo

Hola a todos,

Aquí les voy a hacer una compilación de mis experiencias durante los años en los que viví en España para que entiendan por qué es un país que no recomiendo ni para hacer turismo. Quiero resaltar que este post se basa en mi experiencia. Habrá gente que se sentirá identificada y otros que no. Como ya les conté, llegué a Valencia totalmente engañada ya que me habían vendido un país que no era cierto.

Lo primero que noté fue la falta de higiene. La cantidad de gente que huele mal, que no se lava los dientes, que no sabe del cuidado personal, que se ríe y le faltan la mitad de los dientes. Me cansé de ver a las compañeras del máster con las uñas rotas y el esmalte carcomido. Imagínense el shock viniendo de Venezuela, donde independientemente del estatus económico, la gente siempre está impecable.

Cuando empecé a ir al gimnasio me quedé impactada porque casi todos los monitores eran gordos o muy esqueléticos. En cualquier lugar normal nunca contratarían para trabajar en un gimnasio a una persona que no estuviera en buenas condiciones físicas. Incluso en 2022 cuando volví a pasar el verano en Valencia, la mayoría de los monitores estaban muy lejos de ser un modelo a seguir.

En España no existen los amigos. Durante un año fui a un gimnasio en el que hice muchos “amigos”; me cansé de invitar a gente a comer a mi casa, pagué cafés, etc. Nadie me invitó nunca a su casa ni me pagaron nunca nada. Los españoles ponen la excusa de que ellos “valoran mucho su privacidad”. Se ve que solo aplica para cuando a ellos les toca invitar porque nunca se negaron a comer gratis en mi casa.

Cuando estaba en trámites de comprar mi apartamento, necesitaba que alguien me hiciera el favor de alquilarme una habitación por un par de semanas y todos mis supuestos amigos desaparecieron. Mi idea era pagar, ni siquiera que me hospedaran gratis. Esto es todo lo contrario a lo que te pasaría en Venezuela, donde tus amigos siempre tienen una cama o un plato de comida que ofrecerte.

Diego me decía que había tenido mala suerte con la gente que me había encontrado, pero le demostré lo contrario. Cuando lo conocí, él tenía muchísimos amigos, más de los que yo había tenido en mi vida. Pero resulta que cuando lo invitaban a comer a sus casas, tenía que pagar lo que consumía. Además, la única vez que pidió un favor para que nos ayudaran con una mudanza, aparecieron solo dos que no hicieron casi nada y luego hubo que pagarles el almuerzo a ellos y a sus parejas.

Pero Diego prestaba cosas, hacía favores, invitaba gente a comer a su casa sin cobrarles, etc.

Cuando se casó uno de sus amigos, le pidieron que una de las invitadas a la boda se quedara en la habitación que nosotros alquilábamos en Airbnb. Estuvo más de una semana metida en nuestra casa sin pagar nada y lo mínimo que yo me esperaba es que le dijeran que ese favor ya contaba como regalo de bodas. Pero no, igualmente tuvo que pagar 350 euros del cubierto.

Las pocas veces que volvimos a España, Diego se desvivía escribiéndole a estos supuestos amigos para verlos, pero solo dos personas se preocupaban por verlo.

Otra cosa que es muy traumática sobre todo para los que emigran desde Latinoamérica es lo maleducada y amargada que es la gente.

Incluso te tratan mal cuando vas a una tienda a comprar o cuando pagas por un servicio. No existen las palabras de cortesía como “Buenos días”, “gracias”. Parece que molestas si vas a la tienda, al hospital, al gimnasio, etc.

Si has pagado por un producto o servicio, no pretendas que te traten dignamente y mucho menos que te den información o te expliquen las cosas. El trato al turista no es mejor y tampoco esperes que te hablen en inglés.

Luego de vivir en España y conocer las condiciones laborales, entendí un poco por qué la gente es así. Tienen trabajos que se parecen mucho a la esclavitud y cobran sueldos miserables con los que nunca logran ser independientes. Por lo que la gran mayoría vive amargada y deprimida.

España es de los pocos países del mundo en los que nunca colocan el sueldo en una oferta de trabajo; además, se ofenden si te atreves a preguntarlo. Como he llegado a un momento en mi vida en el que no me permito perder el tiempo, cuando me contactan por LinkedIn, lo único que hago es responder con mi expectativa salarial y varias veces me han respondido que esa “no es la mejor forma de comenzar una conversación sobre trabajo”.

Una amiga me dijo que ella en muchas ocasiones comenzaba a trabajar sin saber lo que iba a cobrar a final de mes.

Con la terrible situación que vive el país y con la tasa de desempleo más alta de la Unión Europea, las empresas se aprovechan y lucran con la miseria de la gente. Aun teniendo sueldos miserables, condiciones abusivas y ambientes laborales enfermizos, les sobran las solicitudes de empleo porque la gente está desesperada.

Te explota tu empresa y el Estado también con sus impuestos.

Empecemos con los autónomos quienes prácticamente mantienen el país. Esta gente paga más de la mitad de sus ingresos en impuestos para no tener derecho a casi nada. Muchos ni siquiera tienen derecho a cobrar una pensión al momento de la jubilación.

España es el país que más les cobra a los autónomos de la Unión Europea y creo que tiene el peor sistema de impuestos del mundo.

Los impuestos no se corresponden ni con el nivel de vida ni con la media de sueldos. Hay países como Luxemburgo o Suiza que cobran más, pero allí se puede ver que ese dinero realmente va al mantenimiento de la infraestructura del país.

Piensen que para vender mi apartamento tuve que hacer un documento que me costó casi 400 euros cuando yo cobraba 1000 al mes. Lo que me dieron luego de 2 meses fue un papel escrito a mano con un sello.

Otro dato interesante: España tiene el récord mundial de bancarrotas: 13.

Pagar tantos impuestos para ni siquiera tener una asistencia sanitaria pública decente. Aquí llegamos a otro punto muy importante: La sanidad pública en España es negligente y mediocre.

Cuando llegué a España tenía seguro médico privado y mi impresión es que los médicos no tenían ni remota idea de lo que estaban haciendo. Por lo que seguí haciendo mis controles médicos cuando iba a Venezuela.

Cuando empecé a trabajar, dejé de pagar el seguro privado para probar la sanidad pública de la que me habían hablado tan bien. Cuando fui a la primera consulta con el médico de cabecera me dijo que me olvidara de controles médicos y que fuera únicamente si estaba enferma.

Cuando me mudé a casa de Diego cambié de médico de cabecera y aunque era educado, tampoco tenía mucha idea de lo que hacía. Luego pasé por una enfermedad muy grave y afortunadamente conseguí un médico venezolano y me cambié de hospital porque si no, me hubieran matado.

Mucha gente muere por negligencias médicas. La prevención no existe y los médicos además de ser incompetentes, no les importa la vida de los pacientes. De hecho, vas a las consultas y ni siquiera te miran a la cara.

Tampoco hay educación sobre salud y buenos hábitos de vida. La mayoría de la gente come porquerías, fuma, no hace deporte y nunca va a hacerse un control anual al médico. España es el país donde he visto más gente obesa.

Tampoco se cuida la salud mental. Muchísima gente vive con ansiedad y depresión y la cita con el psicólogo en la sanidad pública las dan cada año (casi nadie tiene la capacidad económica de pagar un médico privado). Como no hay forma de que un psicólogo haga seguimiento una vez al año, lo que hacen es prescribir medicamentos y como no se trata la causa del problema, la gente se pasa la vida tomando pastillas.

Para verano de 2022, en España se suicidaban 11 personas al día.

A esto hay que sumarle los feminicidios, las violaciones y el acoso sexual. En este aspecto España da mucho miedo sobre todo por la impunidad que existe. Las leyes en ese país son un chiste y la mayoría de los violadores si llegan a ir a la cárcel, en un par de años (como mucho) ya están libres.

Para que vean lo absurdo que es el sistema legal en España, les pongo este ejemplo de casos reales: Un policía hombre viola a una chica y no va a la cárcel, la única penalización es la obligación de asistir a un curso de reeducación sexual. En cambio, una mujer policía roba dinero de una cartera perdida y le dan 22 meses de cárcel.

Además, es abrumadora la cantidad de violaciones cometidas por adolescentes que no llegaban a tener la mayoría de edad. También grupos de violadores que van buscando víctimas a través de aplicaciones como tinder.

Hay un racismo como no he visto en ningún otro lugar. Critican y tienen sobrenombre para todos: los sudamericanos, los franceses, los ingleses, los australianos, los africanos. Da igual de dónde sean, siempre les van a encontrar un “defecto” para justificar el tratarlos como si fueran inferiores.

El país está sucio y más si lo comparas con el resto de Europa. Las aceras están cubiertas de colillas de cigarro y en Valencia tienes también excrementos de perro por todas partes.

A pesar de todo lo que les he contado, la mayoría de los españoles se llena la boca diciendo que “Como en España no se vive en ningún sitio”.

Al español ni se le ocurre oponerse o manifestarse en contra de tantísimos problemas que tiene el país. Desde la crisis del 2008, han ido haciendo cada vez más recortes, bajando los sueldos, empeorando las condiciones, la sanidad cada vez es peor, cada vez hay menos democracia, cada vez están más oprimidos por los impuestos, etc. La sociedad en vez de quejarse se ha vuelto cada vez más mediocre y conformista.

Cuando comento estas cosas con los españoles la respuesta casi siempre es “Bueno, tampoco se está tan mal”.

Recuerdo que, respecto a una de mis publicaciones sobre la situación de España, me escribió una chica que era monitora de gimnasios para insultarme en Facebook y ofreciéndose a pagarme el pasaje para que me regresara a Venezuela.

Porque esa es otra respuesta típica, como los españoles no son capaces de aceptar los comentarios negativos de su país, siempre intentan atacarte hablando mal del tuyo. Aunque sea Luxemburgo o Australia, ellos siempre van a sacar algo para creer ellos mismos que su país no está tan mal.

Lo más gracioso de esta chica que me quería pagar el pasaje a Venezuela, es que ella muchas veces no tenía dinero ni para comprar comida y había arreglado su carro con el dinero que le prestaba el novio. Ella era el vivo ejemplo de las condiciones laborales y el nivel de vida de España, pero se ofendió porque yo escribí de eso en mi blog.

Lógicamente hay países que están peor. Antes de vivir en Colombia, Perú, Vietnam, Camboya, México, Costa Rica, etc.; prefiero vivir en España. Aunque es el tercer mundo de Europa, tiene mejores condiciones que muchos otros países.

También entiendo que para muchos latinos llegar a España puede ser un poco más fácil que llegar a otros países de Europa y muchos lo usan como transición para luego irse a un lugar mejor.

Por ejemplo, para los latinos España es primer mundo, pero para un europeo con un poco de inteligencia, España es lo peor de la Unión Europea y saben que se tienen que ir a otros países donde realmente hay calidad de vida.

Por todo lo que les he explicado anteriormente es que no recomiendo España para emigrar ni para hacer turismo porque es que incluso cuando vas de turista te tratan mal y son racistas; además, sobre todo para las mujeres no es seguro por la gran cantidad de violaciones y feminicidios. A esto hay que sumarle la delincuencia que para verano de 2022 era grave en ciudades como Barcelona y Madrid. Les podría contar muchas más cosas sobre el país pero el post se me quedaría demasiado largo.

Si después de todo lo que te he contado, aun quieres o necesitas emigrar a España, toma en cuenta lo siguiente:

• Los trabajos se parecen mucho a la esclavitud y necesitas estar afiliado a un sindicato que de verdad te proteja. En mi opinión la CGT es el único sindicato de España que funciona.
• No te estanques. Aunque consigas un trabajo en el que estés relativamente bien, sigue buscando mejores opciones a nivel europeo, siempre surgirán ofertas que mejoren tus condiciones actuales.
• Necesitas conocer tus derechos muy bien y los canales que tienes para reclamar. Está la oficina del consumidor, la Agencia Española de Protección de Datos, un canal para denuncias de carácter sanitario, otro canal para denuncias administrativas, etc.
• España tiene el peor sistema de impuestos que he visto en mi vida. Teniendo esto en cuenta, tendrás que investigar y aprender mucho sobre el tema para intentar que el Estado te robe lo mínimo posible.
• Si eres mujer, ten muchísimo cuidado y toma las medidas necesarias para protegerte.