Hola a todos,
Como nuestro viaje a Budapest era para vacaciones y no como nómadas digitales, nos olvidamos de Airbnb y optamos solo por booking.com.
En nuestro rango de precios teníamos dos opciones: Ibis Hotel y Christina Residence.
Como tenían cancelación gratuita, reservamos en ambos para preguntar si el desayuno tenía opciones veganas. Ambos respondieron que sí.
Decidimos quedarnos en el Christina Residence (308 euros por 5 noches) porque era el que mejores reseñas tenía y parecía que la habitación y el desayuno eran mejores.
El hotel queda en un edificio residencial y los dos últimos pisos son los que corresponden al hotel.
El edificio era muy antiguo y el ascensor tenía más de 50 años. Como no funcionaba bien, había carteles por todas partes para indicar cómo proceder si el ascensor iba muy lento o se paraba a mitad de camino.
Llegamos alrededor de las 14h y el recepcionista de la tarde nos atendió muy bien. Nos preparó un té y nos explicó todas las cosas de interés que podíamos visitar en la ciudad.
El área del desayuno y los pasillos no se veían del todo mal.
La habitación a simple vista tampoco estaba mal, pero claramente no se correspondía con un hotel de 4 estrellas y mucho menos con las fotos que hay en internet.
Parecía medianamente limpio, considerando todas las horribles experiencias que hemos tenido en el pasado.
El colchón estaba groseramente viejo y desgastado. No exagero.
En el baño habían intentado hacer una reforma barata para darle un cambio de look, pero las calidades eran pésimas y los acabados y detalles dejaban mucho que desear. La limpieza en el baño no era buena y, por ejemplo, el fondo del WC estaba oscuro.
La limpieza diaria era simplemente para hacer la cama, porque el resto de la habitación quedaba igual. De hecho, ni se molestaban en cambiar las tazas sucias de café. Ni siquiera ponían amenities, cuando en cualquier hotel normal colocan amenities a diario, sobre todo cuando ven que los envases están vacíos.
A pesar de que el desayuno era a partir de las 7am, a esa hora era que la chica comenzaba a colocar las cosas en la mesa.
Como opciones veganas lo único que había eran cereales, leche vegetal, vegetales para hacer una ensalada y pan integral.
El sábado y domingo había otra chica que trabajaba en la cocina y fueron los únicos dos días en que el desayuno fue excelente ya que a las 7am estaba absolutamente toda la comida servida en la mesa. Además, preparaba tofu frito, verduras salteadas, nos dio queso vegano, yogurt vegano y hasta una granola especial.
Ahí nos terminamos de dar cuenta de que la chica que trabajaba en la cocina durante la semana era una incompetente.
Otra cosa es que cuando estaba la chica de la semana, siempre quemaba la comida y se llenaban los dos pisos del hotel de humo y olor a huevos quemados. Insoportable.
Dentro del hotel, todos los trabajadores iban vestidos como si fuera verano porque hacían 30 grados. Para mi gusto, la calefacción era excesiva y, de hecho, los primeros días dormimos mal por el calor que hacía en la habitación. Tuvimos que dejar una ventana abierta siempre.
Les resumo lo bueno y malo del hotel:
Pros
- El recepcionista de la tarde era muy amable y nos ayudó en todo lo que necesitábamos.
- Buena ubicación en la zona de Buda
- Buen desayuno durante el fin de semana
Cons
- La limpieza deja mucho que desear, sobre todo en el baño. En la limpieza diaria, lo único que hacen es arreglar la cama, nada más.
- El colchón está extremadamente viejo y desgastado.
- El baño está viejo. La cortina del baño estaba rota.
- La chica que trabaja en la cocina durante los días de la semana no sabe hacer su trabajo y no tiene el desayuno listo a la hora que corresponde. Además, había que estar entrando a la cocina para pedir las cosas que ya debían estar fuera. Incluso a las 8:30, recién estaba empezando a calentar el pan y a hacer los huevos revueltos. La chica que trabaja en la cocina durante el fin de semana sí es puntual y profesional y a las 7am, ya estaba toda la comida (vegana y no vegana) en su lugar.
- El ascensor está viejo y no funciona correctamente.
- El hotel necesita una reforma.
En definitiva, no logro entender cómo el Christina Residence supuestamente tiene 4 estrellas. Además, veo que los estándares de la gente son muy bajos al momento de evaluar los hoteles y alojamientos turísticos. En serio, me resulta imposible que un hotel así pueda tener casi 10 de puntuación en booking.com.
Lo bueno de la estadía es que cuando regresamos a Porto, sentía que mi casa era un palacio.