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Revisitando Porto y alrededores

Hola a todos,

Cuando compramos la casa en Porto, tenía pensado volver a recorrer la ciudad y luego visitar las ciudades más cercanas en tren.

Pensaba que en un mes ya habríamos terminado todas las cosas pendientes en la casa, pero 4 meses después, aun nos quedaban cosas por hacer, sobre todo por la dificultad de encontrar gente decente y capaz de hacer bien el trabajo.

Así que cuando ya teníamos la casa casi lista, comenzamos a recorrer los fines de semana.

Estas fueron las visitas que hicimos:

  • Porto
  • Matosinhos
  • Vila Nova de Gaia
  • Parque Oriental
  • Ruta Rio
  • Serra Santa Justa
  • Serra do Castiçal
  • Serra da Boneca
  • Parque Natural Senhora do Salto

El primer sábado que tuvimos libre recorrimos Porto. Fuimos caminando desde la casa y en 50 minutos, ya estábamos en el Puente Don Luis I.

Desde que nos mudamos a Porto no nos podíamos creer que hubiera tal cantidad de casas abandonadas. Lo más increíble es que incluso en el centro encuentras también un montón de casas abandonadas y cayéndose a pedazos.

Para mí la ciudad tiene una vibra especial y la arquitectura es hermosa; eso sí, hay partes que son horribles.

Justo ese fin de semana coincidía con un feriado y todo estaba lleno de turistas.

Pasamos por la Librería Lello, pero había mucha cola, por lo que decidí volver en un día de semana.

En mi opinión, la Librería Lello está sobrevalorada y estás más tiempo haciendo cola, que lo que recorres dentro. Además, está todo lleno de gente tomándose fotos, por lo que tampoco puedes recorrer tranquilamente.

Si compras un libro, te descuentan el dinero de la entrada. No hay gran variedad, por lo que nosotros no compramos nada.

La primera vez que visitamos Porto en 2021, habíamos ido caminando desde el alojamiento hasta la playa de Matosinhos. Esta vez hicimos lo mismo, pero nuestra casa está más lejos por lo que tardamos alrededor de 2h30 en llegar a la playa de Matosinhos.

Hay un punto en esta ruta en el que la zona es hermosa y hay unas casas espectaculares de alto nivel. Pero ya luego ves que la arquitectura cambia y solo hay edificios feos y masivos como los que puedes encontrar en el sur de España.

Aunque Matosinhos es una de las zonas más caras, particularmente no me gusta porque no es verde como otras zonas de Porto. Además, la playa de Matosinhos es muy urbana para mi gusto.

Otro fin de semana fuimos con bicicletas y recorrimos también el Parque da Cidade do Porto.

Visitamos Vila Nova de Gaia en dos días porque en invierno está lloviendo siempre y es casi imposible tener el día entero sin lluvia para poder visitar.

El primer día hicimos lo típico que hacen todos los turistas, cruzamos el Puente Don Luis I y fuimos directamente al Monasterio de la Sierra del Pilar. En junio de 2021 cuando visitamos Porto por primera vez, no me gustó como quedaron mis fotos allí y quería repetirlas.

Tampoco quedé 100% contenta con estas fotos ya que el día estaba gris y mi cara estaba hinchada porque la semana anterior me había hecho radiofrecuencia.

Recorrimos la parte turística y como iba a empezar a llover, seguimos caminando hasta el Arrábida Shopping para almorzar en Da Terra.

En ese recorrido hay una parte muy linda y sin turistas.

El siguiente día fuimos caminando desde la casa y cruzamos por el Puente del Infante que está justo antes del Puente Don Luis I.

Antes de cruzar el puente encontramos un gato negro y fue la primera vez en 4 meses que nos encontrábamos un gato que se dejaba acariciar.

Cruzamos el puente y nos encontramos con lo más feo que se puedan imaginar; además de casas abandonadas que se están cayendo a pedazos, todo el recorrido hasta la Cámara Municipal de Vila Nova de Gaia fue muy lúgubre porque las calles estaban llenas de drogadictos y en varias esquinas había gente vendiendo droga.

La arquitectura de Vila Nova de Gaia no tiene nada que ver con la de Porto. Allí solo hay edificios masivos y feos.

Aparte de la calle peatonal que empieza donde está la Cámara Municipal y termina en el Lidl, no hay más nada que sea medianamente decente.

Seguimos recorriendo porque pensábamos que tendría que haber alguna parte de Vila Nova de Gaia que fuera bonita, pero todas las calles parecían de película del lejano oeste.

Imagínense ir caminando por calles en las que absolutamente todas las edificaciones están abandonadas y cayéndose a pedazos.

Mi amiga que vive en Porto ya me había dicho que Vila Nova de Gaia era horrible y que allí solo vivía gente marginal. No me imaginaba que fuera tan extremo.

Llegamos a la estación de tren y decidimos volver a la zona turística para ver la parte de atrás.

Esta parte ya era de fábricas y galpones abandonados. Creo que solo había una bodega de vinos en funcionamiento.

Llegamos a la parte turística, vimos el “Medio Conejo” y pedimos un Bolt para ir a la zona de playa de la que me habían hablado tan bien.

Desde el carro ya se comenzaban a ver casas espectaculares y complejos residenciales cerrados y con vigilancia. Ahí entendimos a dónde se estaban yendo las inversiones en los últimos años.

Bajamos en la Restinga y comenzamos el recorrido por el paseo de la playa. Aunque el paseo parecía nuevo y estaba impecable, la zona en general no me gustó para vivir porque está masificado.

Llegamos hasta donde empezaba la Madalena y pedimos el taxi para volver a la casa.

Luego hicimos el recorrido de lo que son nuestras dos rutas más cercanas para caminar.

Hay una que empieza en el Parque Oriental y la usamos para ir al Leroy Merlin que está en Parque Nascente.

La ruta va al lado de un río y luego de Parque Nascente, se hace más urbana y vamos al lado de las vías del metro. Llegamos hasta la estación de Campainha y volvimos por la misma ruta.

La ruta que hacemos al lado del Douro empieza a 5 minutos de nuestra casa en la Marina de Freixo. Me gusta más que la del Parte Oriental, pero es corta, ya que en menos de una hora llegas al final.

Para hacer senderismo, empezamos por la Serra Santa Justa que está en Valongo. En autobús o tren puedes llegar relativamente cerca de donde empiezan las rutas.

El primer día nos fuimos en el autobús 801 y la parada queda a media hora caminando de nuestra casa. Nos dejó en un sitio donde todavía había que caminar bastante para empezar el sendero. De hecho, cuando llevábamos 2 horas caminando es que recién empezaba la ruta que nos habíamos planteado hacer ese día. Queríamos llegar a la silla romana pero no nos iba a dar tiempo, por lo que lo dejamos para otro día.

Otro sábado fuimos en Bolt para no perder tanto tiempo en la ida.

E las 8:30 de la mañana de febrero, allí aun estaba todo congelado y hacía 0ºC de temperatura.

Algo malo de esta zona para hacer senderismo es que está la gente haciendo motocross por los mismos senderos que son para caminar y se hace excesivamente molesto por el ruido y el olor a humo.

Otro sábado fuimos a la Serra do Castiçal que forma parte del circuito de Serras do Porto. El paisaje es parecido al de las dos rutas anteriores.

Este día llovió durante el recorrido y cuando estábamos terminando la ruta, alrededor de 10 perros salieron corriendo hacia nosotros y uno de ellos mordió a Diego en la pierna. El dueño de los perros nos llevó al centro médico, a la farmacia a comprar los antibióticos y luego a la casa.

Fue traumática la experiencia y éste era ya el 4 accidente que Diego tenía desde que compramos la casa en Porto. Sobre los accidentes de Diego les contaré más adelante.

Terminamos con la Serra da Boneca y Senhora do Salto.

Estos dos lugares quedaban más lejos e ir en Uber nos costaba muy caro. Investigamos para alquilar un carro, pero también salía caro solo para dos días.

Al final, mi amiga Andrea nos prestó su carro y aprovechamos para llevarnos a Luna.

La Serra da Boneca está a 30 minutos en carro de nuestra casa. Hicimos una ruta de 16km y hay varios puntos con unas vistas espectaculares.

Este día hizo mucho sol y terminamos con el cuello rostizado.

El siguiente día fuimos a Senhora do Salto que está casi a la misma distancia en carro. Aquí hicimos dos rutas (Trilho dos Moinhos + Trilho de Alvre) que sumaban un poco más de 10km. Nos enamoramos del lugar y caminamos casi todo el tiempo a la sombra de los árboles, lo que agradecimos luego del solazo del día anterior.

Les dejo los enlaces a mi canal de YouTube:

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