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Cosas que extraño de España

Hola a todos,

A más de un año de vivir en Porto, les hago una lista de las cosas que extraño de España, específicamente de cuando vivía en Valencia.

La ortodoncia de Covadonga Balaguer

En Porto consulté con 6 o 7 dentistas y no encontré a nadie capaz de hacerme un retenedor; ni por el precio ni por la capacidad como tal de tomar los moldes para hacer el retenedor.

Como en cada lugar me habían contado una historia diferente, ya no les tenía ninguna confianza. Además, los precios de los dentistas son una atrocidad.

No me quedó otra opción que ir a mi ortodoncista de Valencia, Covadonga Balaguer, que luego de las experiencias de Porto, no podía quererla y extrañarla más.

La facilidad y comodidad de las devoluciones

En Valencia cualquier compra que haces por internet viene con la etiqueta de devolución; por lo que, si quieres devolver algo, simplemente tienes que pegar la etiqueta al paquete y llevarlo a un pick up point donde tardan un segundo en escanear la etiqueta.

En Porto lo primero es que ctt (el servicio de correo nacional) es lo más arcaico que se puedan imaginar.

Para hacer un envío internacional en vez de llevar el paquete, pagar y listo, debes hacer un procedimiento en internet, crear una cuenta y casi pedirle permiso al presidente para hacer un envío fuera de Portugal.

Una cosa que yo no había visto ni en países llamados del tercer mundo.

Además, no hay pick up points. Las devoluciones se llevan a ctt y la gente que allí trabaja no tiene ni idea de cómo escanear el código de barras y gestionar el envío del paquete.

La facilidad de los envíos con Wallapop

En España, con Wallapop cuando haces una venta, simplemente llevas el paquete a correos, te escanean el código del celular y ellos imprimen la etiqueta.

En Portugal la aplicación para comprar y vender cosas de segunda mano es OLX y si quieres enviar cosas, el procedimiento también es bastante arcaico ya que la app no tiene la opción de envío, y tienes que hacerlo por tu cuenta.

Bancos online sin comisiones

En Portugal son pocos los bancos que no cobran comisiones cuando en España ya casi ningún banco las cobra.

En España el funcionamiento de los bancos es muchísimo más productivo y eficiente.

En Porto te cobran hasta las transferencias y hacer cualquier cosa te supone perder bastante tiempo y sudar de ansiedad.

El precio de hacer una declaración de la renta

En Valencia un contable cobra 18 euros por hacer una declaración de la renta, en Porto lo más barato que encontramos fue casi 70 euros.

Los precios con el IVA incluido

Empezando porque el IVA en España es 21% y en Portugal es 23%.

Luego, en Porto te dan los precios sin IVA para casi cualquier servicio y tienes que ir haciendo cálculos para ver realmente lo que cuesta.

Internet barato

En España hay varias empresas como netllar que ofrecen un servicio de internet sin packs y sin permanencia.

Lo más barato eran 12 euros al mes y cuando aumentamos la potencia, pagábamos 23 euros al mes.

Además, el internet para el celular también es barato. Yo pagaba entre 2 y 3 euros al mes con Simyo.

En Porto, casi todas las empresas te obligan a contratar el pack y la permanencia de 2 años.

Solo el internet de la casa nos cuesta 36 euros al mes y el internet de cada celular cuesta 10 euros. Esto fue lo más barato que pudimos encontrar.

El corte inglés tiene marca Hoka

Esta marca de zapatos es la que uso últimamente por mi fascitis plantar.

En Valencia solía comprarlos de rebajas en el Corte Inglés y me podía salir cada par en 60 o 70 euros.

En Porto el Corte Inglés no tiene Hoka, por lo que tenemos que hacer la compra en Valencia y que los padres de Diego nos lo envíen.

Amazon

Quedé en shock cuando me enteré de que en Portugal no hay Amazon.

Puedes comprar en Amazon España, pero hay cosas que no se entregan en Portugal. Además, mientras en España el transportista es Amazon, en Portugal es la ctt que funciona fatal.

También se nota que el servicio de atención al cliente de Amazon para Portugal es bastante mediocre y no les interesa si dan o no un buen servicio.

Seguros privados sin copagos

Mientras en España hoy en día es raro encontrar un seguro privado que tenga copago, en Portugal no hay ninguno que no los tenga.

Mientras el copago de un seguro médico privado en España puede ser de uno o dos euros, en Portugal es de 15 euros.

Además de eso, para que el seguro cubra odontología ya tienes que pagar más de 100 euros y ningún seguro cubre cáncer.

Por lo tanto, no compensa en lo absoluto contratar un seguro privado.

Que las reclamaciones en la oficina del consumidor funcionen

En España te encuentras los mismos incompetentes que no saben hacer su trabajo, pero si llegas a llamar a la policía o si haces una denuncia ante la oficina del consumidor, la empresa va a arreglar la situación casi de forma inmediata.

Incluso cuando la oficina del consumidor en España tampoco puede hacer gran cosa.

En Portugal, las empresas se ríen de ti, de la policía, de la oficina del consumidor y de tus reseñas negativas.

La única manera de recuperar tu dinero si una empresa te estafa es poner una denuncia ante el tribunal e ir a juicio; es algo indignante.

Calles y carreteras en buen estado

Esta es de las cosas que Diego más extraña ya que cuando sale a hacer bicicleta, es traumático.

A pesar de todas las carencias que tiene España, precisamente las calles están impecables y no encuentras un hueco en ninguna parte.

Las calles y carreteras de Portugal están reventadas y llenas de huecos.

No tener miedo de que me estafen

En Porto vivimos en constante miedo de ser estafados, sobre todo porque sabemos que luego no vamos a tener a ningún organismo que nos defienda.

Cualquier compra de un artículo o contratación de un servicio, puede suponer que te roben el dinero.

Este miedo nunca lo tuve viviendo en Valencia porque, aunque hay gente que es incompetente y quizás no te presten el servicio que corresponde, la situación se resuelve rápido cuando dejas una reseña negativa o una denuncia en la oficina del consumidor.

La gran mayoría de veces solo con la reseña negativa es suficiente.

Además, en España la naturaleza de la gente no es estafarte, en Porto sí.

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