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Intercambio Porto / Narrabeen. La casa de Narrabeen

Hola a todos,

A finales de julio de 2023 cerramos un intercambio de casas para irnos a Narrabeen (Australia) durante los meses de marzo, abril y mayo.

Ambas partes nos habíamos enviado un video de nuestras propiedades y habíamos hecho una video llamada antes de finalizar el intercambio.

Nosotros salimos de Porto el 3 de marzo y llegamos a Narrabeen 2 días después.

Nos habían dejado la llave en un key lock afuera del edificio.

Mi primera impresión al entrar al edificio es que aquello eran las propiedades de la gente de humildes recursos de Australia.

La casa no era lo que me esperaba ni lo que se apreciaba en el video. En persona, el apartamento era viejo y de calidades muy pobres. Habían intentado darle un “glow”, pero aun así era un apartamento antiguo.

Les detallo lo bueno y lo malo de este alojamiento:

Lo bueno:

  • Ubicación. El apartamento estaba a 5 minutos caminando de la playa y del lago. A 20 minutos caminando teníamos el supermercado y la parada de autobús.
  • Limpieza. Aunque el nivel de limpieza no es tan bueno como el de mi casa; el apartamento estaba decente y más si lo comparo con la casa de Durham de nuestro primer intercambio.
  • Cocina amplia. En comparación con mi casa, esta cocina era más amplia y estaba bien equipada.
  • Zona de lavandería. La zona de lavandería estaba separada y tienen secadora. Lo malo es que ni la secadora ni la lavadora funcionaban bien.
  • Espacio. El apartamento en general no estaba mal de espacio y tenía una terraza grande, aunque nosotros no la usamos.
  • Garaje. Tenían garaje techado por lo que no nos teníamos que preocupar por dónde estacionar el carro.
  • Espacio de almacenamiento. En comparación con el intercambio que hicimos en Durham, aquí teníamos el closet vacío y muchísimo espacio de almacenamiento en la cocina.
  • Netflix. La calidad del Netflix aquí es mejor del que tenemos en nuestra casa.

Lo malo

  • Ruidoso. Había mucho ruido de tráfico y para colmo estaban haciendo una remodelación en el apartamento de abajo, por lo que los días de trabajo se hacían infernales.
  • Ventanas. Son de pésima calidad y no aíslan el ruido que viene de la calle. Por lo que, con las ventanas cerradas, el ruido exterior era exactamente el mismo.
  • Calidades. El apartamento en general es muy antiguo y de mala calidad.
  • Zonas de trabajo. Solo había una zona de trabajo completa (escritorio + silla de oficina) y un escritorio en el que yo tenía que trabajar con una silla de comedor.
  • Baño. Solo había un baño que era muy viejo. El WC funcionaba mal; cuando hacías pupú, tenías que tirar de la cadena 3 o 4 veces para que bajara todo.
  • Extractor del baño. El baño solo tenía una luz que encendía directamente el extractor que era extremadamente ruidoso. No había forma de encender la luz sin que se encendiera el extractor.
  • WIFI lento. Otra cosa que nos dificultaba trabajar e incluso usar las redes sociales.
  • Colchón viejo. Si el colchón de la casa de Durham para mí era muy blando, el de esta casa estaba para tirarlo a la basura. Era extremadamente viejo y estaba deshecho; para colmo, cuando le cambiamos la funda, vimos que estaba lleno de manchas color naranja. Tenía la sensación de que ellos habían escondido su colchón y nos habían puesto un colchón que habían recogido de la basura.
  • Aspiradoras. En nuestra casa tenemos 3 aspiradoras y aquí solo había una.
  • Lavavajillas pequeño. En nuestra casa nosotros ponemos el lavavajillas una vez al día, pero en esta casa como el lavavajillas era tan pequeño, debíamos ponerlo 2 o 3 veces al día.
  • Extractor de la cocina. El extractor de la cocina no estaba conectado al tubo de extracción por lo que el humo se quedaba en el mismo sitio.
  • Aire acondicionado. Como el calor en marzo era insoportable, y el apartamento recibía luz directa todo el día, debíamos tener el aire acondicionado encendido desde las 10AM hasta las 18h. El aire acondicionado no tenía sistema de canalización de agua por lo que toda el agua que salía del aire acondicionado le caía a los vecinos de abajo y no estaba dañado, es que los propietarios lo tenían así como si fuera normal. A partir de la segunda semana, lo encendías y el aire salía caliente en vez de frío.

Además, solo había un aire acondicionado que no llegaba a enfriar las habitaciones, por lo que durante el día solo se podía estar en la sala.

  • Luces de la sala. En la sala había dos luces a las que se les podía graduar la intensidad, pero tenían algún problema porque las encendías y empezaban a titilar, lo que era insoportable y al final no las podíamos usar.
  • Cortinas. Las cortinas de esta casa eran casi todas semi transparentes por lo que no reducían prácticamente nada la intensidad del sol, por lo que también se hacía difícil trabajar.
  • Sofá. El sofá solo tenía espacio para dos personas, por lo que solo podías estar sentado; además era de plástico (imitación de cuero) y tuvimos que ponerle una sábana encima ya que se te pegaba a la piel y era incómodo.
  • Cucarachas. Diego se levantaba a las 2:30 de la madrugada para su reunión de empresa y siempre encontraba cucarachas en el baño.

Aunque vean que la lista de cosas malas es bastante larga, nos habíamos adaptado bien a lo que más nos molestaba que era el ruido y ni siquiera le habíamos dado demasiada importancia al resto de cosas.

Como les dije, nosotros llegamos un martes y Mar y Val llegaron a nuestra casa un jueves. Cuando empezaron a quejarse del frío, la lluvia y la humedad de Porto como si fuera nuestra culpa, y crearon una situación hostil e incómoda, fue allí donde nos dimos cuenta e internalizamos la gran cantidad de carencias que tenía este apartamento.

Nosotros no nos quejamos de nada porque es irrealista pensar que la casa a la que voy de intercambio va a estar tan limpia o va a ser tan cómoda para mí como es mi casa. Pero una vez empezaron a quejarse, fuimos sumando los fallos de la casa y eran muchísimos.

Estábamos en un apartamento en el que ni siquiera la poceta funcionaba bien, con muchísimo ruido de tráfico y de los vecinos y para colmo, teniendo que lidiar con dos personas que además de ser maleducadas, se comportaban como niños.

En un futuro post les cuento cómo fue la llegada de Mar y Val a nuestra casa, quiénes nos hicieron la vida imposible a quejas desde que pusieron el pie por primera vez dentro de nuestra propiedad.

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