Hola a todos,
En septiembre de 2016 fui a Ibiza por primera vez. Me organicé para ir en este mes porque me imaginaba que habría menos gente y que todavía habría buen clima para bañarse en la playa.
Ibiza es una isla ubicada en el mar Mediterráneo que forma, junto a Mallorca, Menorca, Formentera y varios islotes de menor tamaño, el archipiélago y comunidad autónoma de las Islas Baleares. Tiene una extensión de 572km² y su población casi se triplica en meses de verano, lo que es una barbaridad.
La isla es conocida internacionalmente por la belleza de sus playas y la calidad de sus aguas. También es famosa por la vida nocturna ya que en verano es pura fiesta y hay infinidad de discotecas. Se dice que es una isla camaleónica ya que se adapta a cualquier plan que tenga el turista.
Lo que yo buscaba era paz y tranquilidad, por eso me alojé en la parte norte. Se supone que el norte es para los que van en plan de relax y el sur para los que van de fiesta.
Lo primero que noté es que no hay una gastronomía típica de la isla (aunque tenga el restaurante más caro del mundo). Hay bastantes restaurantes internacionales pero ningún plato autóctono.
Alquilamos un auto para poder recorrer la isla. Casi todas las playas están llenas de restaurantes, hoteles y tumbonas; por lo que es casi imposible encontrarte una playa solo para ti (para mí fue imposible) ya que está todo super explotado turísticamente. Yo esperaba encontrarme las playas vacías y la verdad, es que era un reto encontrar un huequito en la arena para poner la toalla.
Otra cosa que me pareció muy triste es que casi todas las playas que visitamos estaban llenas de basura, en su mayoría, botellas de alcohol y colillas de cigarros. Imagínense ustedes llegar a una playa y que tenga casi más colillas de cigarro que granos de arena. Si así estaba la parte norte, que supuestamente está alejada de la fiesta y la borrachera, no me quiero imaginar las playas de la parte sur.
Lo bueno de ir en auto es que vas recorriendo y si no te gusta la playa, te vas. Hubo un par de playas que me gustaron y estaban limpias, aunque escapar de la conglomeración de turistas fuera imposible.
También fuimos a ver el casco histórico y esta vez me quedé gratamente sorprendida.
La historia de Ibiza se remonta a más de 3000 años y fue un campo de batalla clave contra los piratas europeos de la Edad Media. Tiene varios fuertes e iglesias fortificadas que fueron creados para defender la isla de los saqueos.
Ibiza, al igual que muchas ciudades de la Península Ibérica, fue gobernada por los árabes durante 500 años y su influencia se sigue sintiendo hoy en día. El idioma oficial de Ibiza es el catalén, aunque yo creía que era el español; además tiene su propio dialecto regional conocido como Ibicenco.
En definitiva, Ibiza no estaría mal si por lo menos estuviera limpia, pero se siente en decadencia debido al turismo masivo y al poco cuidado que se le da. Se me rompió el corazón de ver tantas playas llenas de basura, pero es lo que pasa cuando auspicias un turismo de fiesta y borrachera. Lamentablemente en muchos lugares de España pasa lo mismo.
El casco histórico es lindo aunque puede resultar bastante agobiante (en mi caso) visitarlo por la cantidad de turistas que hay.
No volvería a Ibiza ni lo recomiendo a la gente que, como yo, busca la tranquilidad y ama la naturaleza.
